jueves, 1 de mayo de 2008

El proyecto de investigación de los Yoga Siddhas tamiles

Las dificultades básicas (1ª parte)


Por el Dr. T. N. Ganapathy, Ph DDirector del proyecto de investigación de los Yoga Siddhas tamiles.
El artículo siguiente está extraído del libro, “El Yoga del Siddha Tamil Boganathar”, por Dr. Ganapathy
Existen ciertas dificultades básicas que se va a encontrar todo el que escribe acerca de los Siddhas Tamiles. Las dificultades básicas se relacionan con:
1. La definición del término “Siddha”, la clasificación de los Siddhas y su número.
2. La ausencia de ediciones fiables, la forma poética y el lenguaje usado por los Siddhas.
3. El número de siddhis y los puntos de vista acerca de los siddhis.
4. El uso del yoga tántrico como el método de los Siddhas.
5. Identificación de los Siddhas con los alguimistas.
6. La filosofía del cuerpo humano
7. Un recuento biográfico digno de confianza.
Vamos a comentar detalladamente las dificultades mencionadas.

1. Definición y clasificación de los Siddhas.
La dificultad básica del estudio de los Siddhas comienza con el mismo término "Siddha", que tiene diversos y a menudo solapados significado, sin un uso común aceptado. Es un término sánscrito que significa "cumplido". Un Siddha es un “videgdha”, “totalment cocido”, esto es, ser perfecto. Él representa el ideal indio de perfección. Los tamiles se refieren a cuatro tipos de de mukti o liberación. Estos son salokya, el estatus de vivir en el mundo de Dios, samipya, el estatus de estar más cerca de Dios, sarupya, el estatus de conseguir la forma de Dios, y sayujya, el estatus de ser uno con Dios. Los Siddhas son aquellos que han logrado el último tipo de liberación. Los primeros tres tipos de liberación son llamados padamukti por Tirumular, y el último es llamado siddhi. Tirumular dice que uno cuya mente es serena y clara como un océano es un Siddha. En Tamil Nadu es una costumbre entre los Siddhas remontar su origen hasta Siva, quien es llamado tambión un Siddha.
Un Siddha es uno que ha realizado la no dualidad de jiva y Siva. Es aquél que ha realizado a Siva en sí mismo. Es aquél que ha logrado Sivanubhava. Sivanubhava representa el estado de experiencia donde hay no-dualismo o unidad entre el experimentador jiva y Siva, un jiva-Siva-aikya. Hay un dicho tamil, “Sittan pokku, Sivan pokku”, que significa que un Siddha camina o sigue el camino de Siva.
Un Siddha es un yogin. San Tirumular dice que aquellos que viven en yoga y ven al poder y la luz divinos mediante el yoga son los Siddhas. Es un yogin experimentado quien logra la perfección por el método del auto-esfuerzo. Como yogins, los Siddhas han dicho tener el triple control - control de la respiración, control del fluido seminal, es decir, el control de todas las pasiones y el logro de la ausencia de deseo, y el control de la mente. Un Siddha es uno que tenido éxito en estabilizar estos controles en uno mismo y mantiene la ecuanimidad y un sentido de equilibrio.
Un Siddha es aquél que ha logrado siddhi, un poder psíquico especial y sobrenatural, que se dice que es óctuple en la ciencia del yoga.
Los ocho siddhis son:
(1)anima, la habilidad de volverse tan diminuto como un átomo
(2)mahima, la habilidad de expandirse infinítamente
(3)laghima, levitación o la habilidad de flotar a través del aire
(4)garima, la habilidad de alcanzar todas partes
(5)prakamya, libertad de voluntad, o la habilidad de vencer los obstáculos naturales
(6)isitva, la habilidad para crear o controlar
(7)vasitva, dominio sobre toda la creación
(8)kamavasayitva, el don de cumplir los deseos o la habilidad de lograr todo lo que se desea o de lograr el estado de ausencia de deseos.
El término “Siddha” viene de la palabra “siddhi” que significa la experiencia de Siva. Siddhisvara, Dios de los Siddhis, es un nombre de Siva. Siddhis indican si los practicantes de yoga han logrado un estado para alcanzar la meta final, llamada liberación. Es erróneo pensar que los Siddhas eran magos o ascetas desmañados a los que se atribuían poderes supernaturales. Ellos no son ateos o agnósticos, como se cree comúnmente. Ellos creen en Dios, pero no en un Dios de esta o esa religión. Para la mayoría de ellos hay un Dios, un Siva, sin ninguna limitación ni atributo; Siva es gramatical y filosóficamente una concepción impersonal. El nombre real para "Siva" es "Ello" o "Atu" o "Eso" o "Tal". Un Siddha genuino está más allá del ateísmo y de la fe por igual.
Un Siddha es un librepensador y un revolucionario que se niega a ser transportado por ninguna religión o escritura o ritual. Un Siddha tamil dice: “Un Siddha e aquél que ha quemado los sastras”. Esto no es para ser interpretado en el sentido literal sino en el sentido de que para un jnanin, “los Vedas no son los Vedas”. Un Siddha a aquél que ha logrado un estado de realización donde él no está limitado por los requerimientos de los sastras, y donde él ha ido más allá de los Vedas. En esta fase los sastras se convierten en nadería irrelevantes. Siempre existe un abismo entre las palabras y la experiencia que representan. Buscar la iluminación en palabras e ideas es como esperar que la vista de la hoja de un menú alcance y satisfaga el proceso interno de un hombre hambriento. Una descripión no puede nunca transmitir por sí misma la experiencia. Todos los Sastras, Vedas, Puranas, y y las diferentes sectas religiosas vuelven a la humanidad como animales condicionados. La verdad es sentida en la experiencia y no puede ser traducida totalmente en ningún sastra. Como dice una canción Doha: “Mirar a la fruta del árbol no es olfatearla. ¿Se va la enfermedad ante la vista del médico?. Los Siddhas parecían estar en contra de las escrituras, pero su temperamente es devoto. Ellos son "rebeldes píos" dentro del campo de la religión, y como tales, no son ateos. Karai Siddhar establece una distinción entre un Siddha y un no Siddha diciendo que un Siddha señala al camino de la experiencia mientras que un no Siddha señala al camino de la escrituras.
Un Siddha es aquél que disfruta de perfecto gozo incluso mientras está en su cuerpo físico. El cuerpo es tratado por él como el mejor medio de realizar la verdad. Al igual que los ríos sagrados, los templo, las montañas, etc., el cuerpo es un pasaje sagrado hacia la última Realidad. Sivavakkiyar eleva una pertinente cuestión: ¿por qué debemos ir a estos lugares cuando el umbral está en nosotros. Los Siddhas conocen cómo preservar el cuerpo a através de rayos (“mani” en Tamil) ondas de sonido (“mantra”) y medicinas (“marundu” or “ausadha” en Tamil). La técnica de la preservación del cuerpo es llamada kaya sadhana: es un intento de obtener un cuerpo perfecto, llamado Siddha deha. Resumiendo, uno que ha obtenido el poder de desmaterializar y espiritualizar el cuerpo, y conoce cómo transmutar el físico corruptible en la superfísica e incorruptible base de la vida es un Siddha. Un Siddha alcanza y posee un cuerpo eterno espiritual llamado divya-deha, y es uno que finalmente el ciclo kármico y obtiene la liberación del tiempo. Usando la expresión de Mircea Eliade, podemos decir que los Siddhas son aquellos que "entendieron la liberación como la conquista de la inmortalidad".
Un rasgo notable que encontramos entre los Siddhas tamiles es la ausencia total cualquier culto local de la deidad. Ellos no son “henolocoteístas”, creyentes en un Dios local. Ningún Siddha genuino en Tamil Nada, incluido Tirumular, ha cantado en alabanza de cualquier Dios local o deidad personal de Dios. Éste es un rasgo que distingue a los Siddhas de los otros santos, especialmente Alwars y Nayanmars. Podemos decir que el rasgo característico esencia, la diferencia para distinguir una Siddha genuino de un no Siddha es descubrir si él/ella ha cantado en alabanza de cualquier Dios o Deidad local. Según Sivavakkiyar un Siddha no adora ninguna deidad en el templo. Como canta un Baul: “el camino hacia el absoluto está bloqueado por templos, mezquitas y por maestros. El Markendaya Purana dice que el conocedor de yoga no debe participar en peregrinaciones a los templos de los dioses20. Pambatticcittar dice también que aquellos que han construido templos para dioses locales y han ofrecido oraciones son aquellos que no están a los pies del Señor real. Tirumular también refiere que los Siddhas son aquellos que no han intentado el camino de cualquier religión (sectaria). Los Siddhas tamiles no pertenecen a ninguna religión o samayam. “Samayam” en Tamil significa “convención”, “regla”.
Las canciones de los Siddhas no muestran ningún rastro de pensamiento colectivo; ni tampoco hay ahí ninguna sugerencia de predicación; ellos indican sólo la dirección. Uno puede discernir ciertas características comunes entre los Siddhas, que hace distinguirlos por una lado de los "eruditos" poetas por un lado y por otro lado de los poetas religiosos sectarios. Para ser un Siddha, la afiliación sectaria es irrelevante. Su filosofía es la iluminación como diferente de la doctrina; no es un enfoque teórico y formalista hacia los problemas. Los Siddhas tamiles no son constructores de sistemas; toda su técnica es para remover a la gente de sus rutinas intelectuales y su moralidad convencional estéril. Establecieron ante su audiencia un abrasivo, conmovedor mensaje no comprometido exhortándola a verter sus ilusiones, pretensiones y ortodoxias vacías a favor de una intensa, directa y personal confrontación con la verdad. Ellos son los "sin avatar", no conformistas, aspirantes espirituales, anhelando un enfoque directo y natural, y una experiencia más intensa de la verdad absoluta. Ellos rechazaron los valores y el prestigio de las escrituras, que permanecen como el privilgegio de unos pocos en el Hinduismo. Los Siddhas tamiles pueden ser considerados como "sin escrituras" o "sin libros", o la escuela nirgrantha del Hinduismo, ya que ellos están desapegados de cualquier autoridad escritural.
Los Siddhas tamiles pertenecen a una "contra-tradición" no conformistas. Lo que significa "contra-tradición" no es "que se opone a tradición", sino "la tradición que se opone". Los Siddhas desafiaron muchas de las creencia y prácticas aceptadas del pensamiento y la sociedad hindú. Denunciaron la adoración ritual de los ídolos y la solicitud de oraciones como ataduras reteniendo la liberación del alama. Su lenguja era tan inconvencional como lo fueron sus vidas. Esto condujo a muchas gente a pensar que los Siddhas tamiles eran budistas disfrazados, ya que el Budismo critica también vehementemente las doctrinas de los hindús.
Para los Siddhas, la afiliación sectaria es más bien innecesaria e irrelevante. Aun así es costrumbre clasificar a los Siddhas en los grupos anteriores. El Hatha-Yoga Pradipika, un texto clásico sobre hatha yoga, contiene una lista de Maha-Siddhas comenzando con Adinatha28. Adinatha es el místico nombre de Siva. Los Siddhas pertenecientes a la escuela de Adinatha son llamados Natha Siddhas. Son conocidos como kan-phatta, porque han atravesado los cartílagos de sus orejas con un pesado anillo, conocido darsana, que por su peso han cortado largas hendiduras en los lóbulos de las orejas. Gautama Buddha tenía esta marca en él. Los Natha Siddhas originados en el Norte de la India y su literatura contiene un número de textos de hatha yoga, de los cuales los más famosos son el Hatha Yoga Pradipika, el Gheranda Samhita y el Siva Samhita. Ellos tuvieron el sobrenombre de Natha añadido a sus propios nombres. El término “Natha” en su sentido teológico está restringido a un preceptor Saiva, igual que el apellido gosain está confinado a los maestros de la fe Vaishnava. En conexión con esto sería interesante notar que el término “Natha” se deriva de la palabra del lenguaje Pracrit “Nattha”, significando el anillo de la nariz que se usa para controlar a un animal. Este término probablemente haya sido adoptado por los Siddhas para referirse a aquél que ha controlado su mente a través del yoga.
El concepto de sacrificio está conectado con este número, y el “dieciocho” parece ser el equivalente simbólico al hombre como sacrificio. Según la mitología china existen dieciocho lohans (arhats). Desde el punto de vista de la alquimia dieciocho es un número importante. En el Rasesvara Darsana se comentan dieciocho formas de elaboración del mercurio o dieciocho forma de tratar rápidamente a la plata. En el Ramayana la guerra tuvo lugar durante dieciocho días: y hay dieciocho Agamas, dieciocho consonantes, etc. Existe otro punto de vista sobre que el número dieciocho puede referirse también a los "dieciocho" mundos del ser humano ordinario - los seis órganos de lo sentidos, los objetos de los seis órganos de los sentidos y las seis formas de consciencia del ojo, oído, nariza, lengua, cuerpo y mente. Los Siddhas son aquellos que han ido más allá, trascendiendo los dieciocho mundos de los hombres ordinarios. Por tanto son mencionados aquí como los "dieciocho Siddhas", es decir, personas que han conquistado los "dieciocho mundos". En la medicina Siddha el número dieciocho tienen un lugar especial. Macchamunmi dice que hay dieciocho hierbas importantes. En el kundalini yoga “dieciocho” es un número significativo; kundalini tras alcanzar sahasrara tiene que cruzar aún a través de dieciocho mahavidyas. Estos son dieciocho centros sutiles que rodean la región de sahasrara, para finalmente unirse con Siva, en un acto conocido como maithuna yoga. En el Sattaimuni Jnanam el Siddha se refiere a las "dieciocho" letras que son parte y parcela de valai, es decir, la kundalini sakti. En su obra Padinen Siddhar Yogakkovai Parayanappa, Yogi Ramaiah dice que el número "dieciocho" representa dieciocho aspectos diferentes del yoga, aunque no los ha explicado. Él dice también que de los ochenta y cuatro Siddhas, los más importantes son dieciocho, y por tanto esta tradición de yoga es llamada Padinen Yoga Siddha Tradition. Todas estas evidencias internas de Siddha yoga y de medicina han sido tomadas para demostrar que "dieciocho" en los "dieciocho Siddhas tamiles" no se refiere al número de Siddhas (porque los Siddhas son innumerables), sino a los logros de un Siddha. Pero parece que para el autor ese número de "dieciocho" se refiere a los dieciocho siddhis. Resumiendo, el número "dieciocho" es un número sagrado entre los Siddhas tamiles. Éste es un verso que dice que los Siddhas conocen dieciocho lenguajes. Aquí lenguaje significa "siddhi".

Copyright. Babaji's Kriya Yoga and Publications. Diciembre 2001